Les gusta mi poesía

jueves, 18 de noviembre de 2010

La noche

Aprovecho la entrada de hoy para anunciar mi ausencia durante algunas semanas, ya que me tomo unas pequeñas vaciones y a la vuelta me veré inmerso en algunos quehaceres que, probablemente retrasen mi semanal publicación. En cualquier caso, no me olviden, amenazo con volver:


El sol, en su ocaso,
Tiñe de naranja el horizonte
Como si un enorme biombo
Se extendiera ante nosotros
Ocultándonos su luz
Reflejando su aura
Oscureciendo la vida
Entregándonos la noche
Solo hasta el amanecer


Nos han secuestrado la luna
Nos han cubierto de manchas
La gente presurosa se cobija
La humedad ingrata nos empapa

Es la hora de las maquinaciones
De los sueños irreales
De los suspiros y anhelos
De los deseos carnales

Los enamorados se añoran
Los capitalistas se lamentan
Los religiosos oran
Y los bastardos se enfrentan

La noche lo sabe todo
Lo cubre con su silencio
Mañana será otro día
Otra vida, otro cuento

jueves, 11 de noviembre de 2010

Mi nieto

Esta semana mis amigos lectores me permitirán una  licencia, escribiendo unos versitos a mi nieto, a fin de cuentas, su inagotable energía y sus ganas de contar siempre con su abuelo para todo, es una de las causas de que yo tenga abandonada la escritura, así que se merece esta dedicatoria:



Un pedacito de cielo
Trastabilla a mí alrededor
Rebelándose a la vida
Con propuestas surrealistas

…que si este coche se estrella
…que el patito salta poco
…que puede ser antichoque…
…el mando del televisor
…que subiendo a una mesa
se ven mejor las estrellas
…que el aire acondicionado
es un enano soplón


Y cuando toma un descanso
Y retomo la lectura
Comienza de nuevo el duende
A revolver tu rincón


Y es que son solo dos años
Una edad muy peligrosa
Cuyo principal problema
Radica en ser juguetón


Aprovecha este momento
Radicaliza a tu abuelo
Que todo lo que él desea
Lo tiene el trozo de cielo

jueves, 4 de noviembre de 2010

Destruidos

Acabo de asistir esta tarde a una tertulia sobre "La batalla de Chiclana - Bicentenario 1811-2011", y se me ha ocurrido que es el momento propicio para recordar lo que dan de sí las guerras:




Quizás fue innecesario preguntarlo
Quizás no se buscó lo suficiente
Lo cierto es que perdimos mucha gente
Lo cierto es que el pasado nunca vuelve

Recogieron relámpagos de acero
Surgieron de la nada cual leopardos
Las batallas narradas no son válidas
Hubo que reinventarlas y sufrirlas

La historia no se escribe con recuerdos
Se vive cada día y se descubre
Si hay momentos amargos, algo queda
Las cosas cuando cuestan son duraderas

Se desvanecen en etéreos suspiros
Los ratos de placer, las carcajadas
Cuando ruge el poder, no queda nada
Cuando el sol se transforma cual granada

Los espíritus de tanto hombre valiente
Sostienen nuestra llama incandescente
Para evitar repetir los errores
Para enseñar caminos alternantes

Quizás será mejor no olvidarlo
Quien sabe que momentos nos esperan
Generaciones enteras sucumbieron
Para que otras posteriores lo supieran

Aferremos por tanto la enseñanza
La guerra es cruel,
No es una chanza